Las principales ciudades del mundo se enfrentan, cada vez más, a problemas de movilidad urbana. Esto es aún más patente en los países en desarrollo, donde no siempre se llega a proporcionar servicios públicos de transporte adecuados para atender a una población urbana cada vez mayor. Esto es más evidente en los suburbios donde, por lo general, viven las familias de bajos ingresos.
El desafío está en cómo mejorar el acceso a la red de transporte público de los ciudadanos que más lo necesitan. No es realista esperar que los sistemas de ferrocarril y de metro puedan acceder a todos los rincones de una ciudad y menos aún cuando el paisaje urbano está siempre en expansión. Esto provoca que usuarios en la periferia, por lo general de menor poder económico, deban desplazarse más de 30 minutos a pie o en autobús, con el costo de tiempo y monetario adicional que esto supone, para llegar a su estación más cercana. Por tanto, es necesario investigar soluciones innovadoras (y generalmente de bajo costo) para proveer a las comunidades con menor nivel de ingresos el acceso a estos servicios esenciales. Las soluciones no necesitan ser complicadas, por ejemplo los beneficios de la bicicleta son fácilmente reconocibles: reducción del tiempo de viaje y los gastos y aumento de la salud y de la calidad de vida.
Una de las metrópolis que busca ofrecer este enlace adicional en la periferia de las ciudades, es Río de Janeiro. A diferencia de la mayoría de los principales sistemas de la bicis en otras ciudades, este proyecto está dirigido a los distritos en la periferia de la ciudad y no al centro. Steer Davies Gleave ha sido contratado por el Secretario de Estado de Transportes de Río de Janeiro (SETRANS), financiado por el Banco Mundial (BIRD), para desarrollar un programa de gestión de la integración de las bicicletas en el sistema ferroviario con enfoque en 6 estaciones regionales de tren. El objetivo del proyecto es mejorar la calidad de vida de los residentes de menos poder adquisitivo, facilitando y fomentando el uso de la bicicleta como parte del viaje para aquellos que se desplazan en ferrocarril diariamente. Esté atento a este espacio para conocer más sobre como Steer Davies Gleave logra el reto de desarrollar un programa que no sólo facilite el acceso a una bicicleta para las comunidades de menor ingresos, pero que también puede fomentar una transferencia modal que traerá beneficios reales a la comunidad local en términos de ahorro de costes y tiempo, reduciendo la congestión y la contaminación y maximizando el uso de las inversiones en infraestructuras existentes.