Después de 19 años como miembro no ejecutivo de la Junta Directiva, el fundador de la empresa, Jim Steer, dejará la misma en octubre.
Tras reincorporarse a la Junta en 2005, después de haberse alejado de un rol de liderazgo directo en 2002, Jim ha sido una valiosa voz de experiencia durante un período que ha tenido grandes cambios económicos y políticos.
La capacidad de adaptarse a los cambios en el panorama global ha sido una constante en la carrera de Jim como consultor. Hoy, mientras enfrentamos un mercado complejo, las lecciones de flexibilidad y agilidad que ha compartido son más relevantes que nunca.
Los orígenes de Steer
Aproximadamente una década antes de fundar Steer, Jim comenzó a trabajar en consultoría después de graduarse de Ingeniería Civil, completando su tesis en el entonces incipiente campo de la planificación de transporte. Jim trabajó en consultoría durante nueve años antes de fundar Steer Davies Gleave junto a dos excolegas, John Davies y Graham Gleave, quienes en ese momento trabajaban como consultores individuales en Brasil y Mozambique, respectivamente.
"La empresa era una sociedad de tres personas, pero con un amplio abanico de habilidades complementarias trabajando en el campo del transporte. La visión era salir y ganar los proyectos más interesantes que pudiéramos encontrar", dice Jim.
Uno de los primeros proyectos ganados por Steer Davies Gleave fue una licitación competitiva para estimar la demanda para el propuesto enlace ferroviario del Aeropuerto de Mánchester. Esto llevó a una serie de trabajos para la Junta de Ferrocarriles Británicos, que estaba nacionalizada en ese momento, incluida la primera aplicación de análisis conjunto (y preferencia declarada) en el Reino Unido.
"Solo puedes innovar así si has construido una buena relación de confianza con tu cliente", añade.
Innovar para mantenerse a la vanguardia
El auge de la economía de libre mercado en la década de 1980 presentó algunos desafíos interesantes en el transporte, pero "no había interés en planificar nada", dice Jim.
"La idea de mirar a una ciudad como Mánchester, Newcastle o cualquier otra y preguntarse cuáles serían sus necesidades futuras de transporte había desaparecido.
"Eso era interesante porque, ¿qué harías como consultor de transporte?"
Durante los siguientes 25 años, Jim y un equipo creciente de personas altamente capacitadas respondieron la pregunta de 'qué hacer como consultor de transporte' de manera creativa que fueron receptivas a las condiciones del mercado. Jim trabajó en proyectos en Australia, Nueva Zelanda, Pakistán, Indonesia, España, Irlanda y los EE. UU.
En la década de 1980, en un entorno de desregulación financiera en el Reino Unido, un grupo de bancos estadounidenses intentaba establecer el mercado en el sitio de los antiguos muelles abandonados del este de Londres. "Los mercados financieros estaban siendo desregulados, pero simplemente no podían obtener un lugar en el centro financiero tradicional de Londres, 'the City', y estaban desesperados", dice Jim.
"Anteriormente, habíamos ayudado a una firma importante de arquitectura estadounidense, Skidmore, Owings and Merrill. Les ayudé con un par de proyectos, estaban tratando de entrar al mercado del Reino Unido, y habían sido contratados por los desarrolladores de Canary Wharf."
"Peter Twelftree les dio una presentación magistral y desarrolló el proyecto a partir de ahí. Fue una asociación muy duradera para nosotros, y muchas personas contribuyeron a ella."
La privatización ferroviaria en la década de 1990 también presentó oportunidades. En los primeros días de Steer Davies Gleave, se le pidió a Jim desarrollar una estrategia comercial para el nuevo negocio ferroviario InterCity de BR. Esto significó que él y la empresa entendieran la realidade de las posibilidades comerciales de las empresas ferroviarias establecidas como franquicias cuando British Rail fue privatizada. Ahora, pudo utilizar este conocimiento para ayudar al empresario británico Richard Branson a ganar la franquicia de la línea principal de la costa oeste. Esto ahora se considera un caso positivo en la historia de la experiencia del Reino Unido con la privatización ferroviaria, una que logró su misión de franquicia altamente desafiante.
"Esto fue consultoría práctica, construyendo el Virgin Rail Group desde cero y negociando su contrato clave para mejorar la línea principal de la costa oeste", dice Jim.
"La gente tiene una visión negativa de la privatización ferroviaria ahora, pero Virgin tenía una franquicia que les comprometía a triplicar el número de personas que viajaban en tren desde Euston, y lo lograron. Es un logro increíble y, para mí, incomparable como consultor: no podrías pedir nada mejor."
El futuro de Steer
Steer hoy es una empresa mucho más grande que se ha diversificado del transporte hacia la energía, el desarrollo económico, los deportes y eventos, y mucho más. Una cosa que Jim Steer dice que sigue igual, es la necesidad de ser ágil, creativo y lleno de recursos en un mundo en constante cambio.
Mirando hacia el futuro, Jim continuará teniendo un rol dentro de la empresa, apoyando la participación de Steer en organismos industriales, haciendo inteligencia de mercado y también contribuyendo al programa de Aprendizaje y Desarrollo. Jim también explorará formas de llegar a jóvenes y universitarios, ayudándoles a explorar opciones de carrera y aprender sobre transporte, planificación, infraestructura y consultoría.
¿Cómo manejará Jim su tiempo fuera de Steer?
"Dirijo un pequeño grupo de investigación de transporte (Greengauge 21) que busca plantear preguntas que a veces se consideran incómodas y hacer sugerencias, adoptando una perspectiva más desafiante de lo que es apropiado para las prácticas de consultoría a gran escala, y seguiré con eso, con la ayuda de otras personas.
"Creo que mis días de navegar en lugares remotos y maravillosos como lo es Tonga, han terminado, pero tengo un barco fluvial que me mantiene entretenido. La verdad es que lo primero que me viene a la mente es la familia. Tengo una gran familia que sigue creciendo y eso significa mucho para mí, como lo es para la mayoría de las personas."
En nombre de todas las personas en Steer, pasados y presentes, ¡muchas gracias, Jim!