Los ferris de pasajeros son opciones de transporte público versátiles y asequibles para muchas agencias y ciudades. La planificación de un servicio de ferry de éxito debe abordarse estratégicamente, teniendo en cuenta su finalidad prevista, su estructura operativa y cómo encajará en la red de transporte público general.
En el contexto actual de presupuestos ajustados para el transporte público, las ciudades y organizaciones cada vez más recurren a los ferris como soluciones de transporte. El apetito por los ferris ha crecido durante los años, ya que ofrecen oportunidades para un servicio de transporte completamente nuevo a un coste relativamente bajo, en comparación con los servicios de carril guía fijo nuevos o ampliados, como el metro o el tren de cercanías.
Los sistemas de ferry también suelen tener subvenciones menores por pasajero que los trenes de cercanías o los servicios de autobús expreso. Por ejemplo, el nuevo sistema NYC Ferry de Nueva York, basado en el estudio Citywide Ferry de 2013 de Steer Davies Gleave, tiene previsto operar con una subvención de 6,60 dólares por pasajero, que es menos de lo que recibe el ferrocarril de Long Island y los autobuses expresos de la ciudad.
Además, el coste capital de los ferris es menor que el de los servicios con carril guía fijo. La ciudad de Nueva York invirtió 55 millones de dólares en mejoras de la infraestructura y en nuevos desembarcos para el servicio NYC Ferry, mientras que la extensión de las líneas de metro de la ciudad con una estación adicional cuesta aproximadamente 2,4 mil millones de dólares.
Más allá del atractivo económico de los ferris, pueden ofrecer soluciones para una serie de problemas, como la accesibilidad para las comunidades desfavorecidas, mitigar los riesgos y la redundancia del sistema de transporte público.
Los ferris pueden ofrecer soluciones de transporte cuando otras partes de la red de transporte han sufrido interrupciones del servicio, desde huelgas y cortes eléctricos hasta interrupciones causadas por desastres naturales y terrorismo. Es probable que los ferris vuelvan a utilizarse para ayudar a mitigar el impacto de una interrupción importante del sistema en Nueva York cuando los túneles del tren L bajo el East River se cierren por mantenimiento en 2019.
Gracias a la versatilidad y asequibilidad de los ferris, muchas agencias y ciudades tienen previsto aprovechar sus canales acuáticos. Al hacerlo, es fundamental considerar la finalidad del ferry dentro de la red global de transporte público, ya que tiene implicaciones para la vida del servicio y su estructura operativa.
La finalidad del ferry dentro de la red global motiva muchos aspectos del servicio incluyendo, entre otros, el coste capital, las horas de funcionamiento y la propiedad de la embarcación. Por ejemplo, un ferry destinado a la demanda de viajes diarios tendrá objetivos muy diferentes a un servicio estacional que lleva pasajeros a uno de los parques estatales, aunque la misma embarcación podría servir a ambas finalidades.
Es importante identificar la vida prevista del servicio, ya que motiva la estructura operativa. Además de las características operativas y la organización del servicio, debe estar bien integrado en la red global de transporte para tener éxito.
En conclusión, los ferris son soluciones de transporte público asequibles y versátiles preferidas por muchos por su visibilidad y facilidad de implantación pero, para que sea más eficaz, el servicio de ferry debe abordarse estratégicamente. Esta planificación debería centrarse en la finalidad del ferry dentro de la red global de transporte público, la vida del servicio y la mejor estructura operativa para ofrecer un servicio exitoso.
Puede leer nuestro estudio Citywide Ferry en la página web de la Corporación de Desarrollo Económico de la ciudad de Nueva York.